Lado A
"...le mandé un mensaje para contarle lo que estaba pasando. No lo pensé, la verdad pero dije “ya fue, le mandó” total veníamos hablando seguido y me parecía un tema divertido para retomar en nuestra cena de sábado. Me respondió, bastante ansioso y divertido, así que nos pusimos a hablar hasta que dio el tema. 2 am, me llega un mensaje suyo para venir a casa. Sin dudarlo ni pensar demasiado le dije que si, total ¿qué podía pasar? Nos vimos varias veces, nuestros encuentros siempre fueron muy divertidos, estábamos los dos bastantes “picados” así que ya fue. Vino. Afuera llovía torrencialmente, así que apareció todo mojado. Un poco sueltos por el alcohol que cada uno había tomado, nos empezamos a reír así que lo único que llegué a ofrecerle fue un vaso enorme de agua para intentar limpiar el cuerpo. Hablamos, una banda, como acostumbrabamos a hacer cada vez que nos veíamos. Pasamos por temas diversos hasta que me puse en “modo las cosas claras” y empecé a filosofar sobre lo que es...